Realizamos este escrito desde una trinchera ahora desaparecida pero que le durante años le dio vida a el Auditorio Che Guevara, nos referimos al Cine Club Universitario, este proyecto surgió después de la huelga (1999-2000), por estudiantes de la Facultad de Derecho con la intención de abrir un espacio dentro de la universidad para que el cine estuviera cercano a la gente sin necesidad de grandes gastos, y también una oportunidad de difundir otro tipo de cine y no sólo el hollywoodense, además de un espacio para transmitir documentales e impulsar la discusión y la crítica de nuestra realidad política
Aunque con fallas, serios problemas de infraestructura, el boicot constante de las autoridades hacia la propaganda de cualquier trabajo que se re realizase en el auditorio, el proyecto salió adelante por casi diez años.
Sin embargo a partir del 2009, cuando vino la “nueva administración del auditorio”, las cosas cambiaron y no para bien, al menos no para el proyecto de cine. Pedir el auditorio para proyectar semanalmente se hacía lleno de complicaciones burocráticas, asistir a dos asambleas distintas, escribir a un tal correo de la comisión de horarios para no obtener nunca respuesta, y obviamente la aprobación de la comisión suprema, pues sin esta nada más el auditorio estaba cerrado.
En un principio pensamos como proyecto, que esto era falta de organización dentro de las comisiones y no mala fé de las personas que estaban en estas comisiones hacia el proyecto. Hasta que un par de semanas después se apareció “la representante” de la comisión de horarios y en medio de la proyección de la película “Los Herederos”, armó todo un show de reclamos y gritos y si no es porque lo evitamos, hubiera desconectado los cables para parar la proyección, aún cuando habían más de diez personas viendo la película.
¿Cuál era la razón de esta actitud hacia el proyecto? Pronto lo supimos…sacar cualquier trabajo del auditorio que no pudiera ser manejado por los dirigentes de tales comisiones…Después de diversos boicots, ensamblando “eventos” en el día que tocaba proyectar, e incluso el surgimiento de un nuevo proyecto fantasma de cine en el auditorio… nuestro proyecto y ganas de trabajar en ese auditorio que había sido tristemente acaparado por “los líderes y voceros del ¿movimiento popular, estudiantil?”, se fue diluyendo y el Cine Popular Universitario terminó, ante un auditorio cerrado y monopolizado.
¿A qué vienen estás líneas? Sólo un pequeño relato de cómo sucedieron las cosas dentro del Auditorio Che Guevara, mientras se encontraba bajo la “administración” de los que ahora dicen que siempre estuvo abierto para los estudiantes y el movimiento popular.
Solidaridad y apoyo incondicional con los colectivos e individuos que han reabierto el Auditorio Che Guevara.
Enero 2014
Salud y Anarquía.
Cine Popular Universitario.